Los restos de la activista defensora de los derechos de los animales y rescatista de equinos, Elena Larrea Zepeda, fueron velados a puerta cerrada por unas horas en las instalaciones de Cuacolandia, ubicadas en Atlixco, Puebla.

La familia de Elena guardó hermetismo, por lo que, sin llamar la atención, una carroza fúnebre color gris ingresó alrededor de las 18:00 horas del miércoles al santuario.
Al lugar solamente ingresaron familiares, amigos cercanos y algunas autoridades, como la presidenta municipal de Atlixco, Ariadna Ayala.
El féretro, color caoba, con los restos de Elena Larrea se colocó en una de las caballerizas. Alrededor se montaron flores blancas y coronas con mensajes de agradecimiento y despedida. También se puso un altar con su fotografía y veladoras.

Los equinos y animales rescatados lloraron la ausencia de Elena. Incluso, llevaron a sus caballos más cercanos al féretro para que se despidieran de la mujer que tanto los amó.
Por la noche, la familia subió los restos de la activista y modelo a la carroza y los llevó a la Ciudad de México, donde descansarán en paz en un nicho familiar.
La modelo, activista y fundadora de Cuacolandia, Elena Larrea Zepeda Carranza, tendrá un homenaje póstumo a las 20:00 horas del viernes, 22 de marzo, en el Zócalo de la ciudad de Puebla.
La convocatoria la realizó el Movimiento Animalista y abogados animalistas de la entidad; los organizadores piden a los poblanos asistir con ropa blanca y una veladora.

Convocatoria en CDMX
Por otra parte, en la Ciudad de México, diversos colectivos convocaron a un homenaje póstumo el domingo 24 de marzo a las 18:30 horas en la explanada de Bellas Artes.
Cabe recordar que la también influencer falleció el 19 de marzo alrededor de las 15:30 horas debido a una trombosis pulmonar que le ocasionó un coágulo en el pulmón tras una cirugía.

Hasta el momento se desconoce el lugar donde Elena se realizó la cirugía, tampoco hay información por parte de la Fiscalía poblana en donde se dé a conocer si se realizará alguna investigación.
Los caballos, burros, borregos y otros animales de granja que Elena rescató permanecen al interior de Cuacolandia.

Hasta el momento, algunos empleados están atendiendo a los animales. Se desconoce cuándo el Gobierno del estado de Puebla, a través del Instituto de Bienestar Animal, colaborará para continuar con el cuidado de los más de 300 ejemplares que habitan en dicho santuario.