DEBATEN SOBRE EL POTENCIAL EFECTO DE UNA RECESIÓN EN EUA SOBRE MÉXICO
Por Agencias, 23/01/2023 16:27
A lo largo de los últimos trimestres uno de los escenarios que más se considera es el de una recesión económica causada por el agresivo ajuste de alza de tasas por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos y de algunos otros bancos centrales. Este escenario si bien parece inminente aún es un supuesto cuyas características y temporalidad aún parecen poco claras.
De momento lo único que se puede comprobar es que la economía mundial ya muestra claros signos de enfriamiento como la desaceleración, sin embargo también hay datos que muestran una mayor resiliencia de la economía mundial, en particular de Estados Unidos, la mayor economía del mundo, que en rubros clave, como la creación de empleo, ha sido más resistente de lo previsto a la astringencia en el costo del dinero.
De mientras quienes esperaban que la recesión en Estados Unidos, México y otros países ya estuviera presente al inicio de 2023, aún deberán esperar.
“El consenso tendrá que posponer sus avisos de recesión en Estados Unidos a medida que se presenten los datos del primer trimestre, lo que conducirá a revisiones al alza en las perspectivas del producto interno bruto de México a medida que el crecimiento demuestre ser resistente”, escribieron analistas de la mayor gestora de fondos de inversión del mundo Vanguard México, en un reporte.
Si bien la estrecha relación comercial y la cercanía geográfica de México con Estados Unidos hace a la nación más vulnerable a los altibajos económicos del vecino del Norte, los expertos de Vanguard consideran que hay aspectos que hacen a México resistente a los choques porque el crecimiento del país está más diversificado que en cualquier otro momento.
“Aunque el auge de las exportaciones a Estados Unidos impulsó el crecimiento durante gran parte de 2021 y principios de 2022, el fuerte consumo interno, impulsado por un crecimiento positivo de los salarios reales y la sólida confianza de los consumidores, es ahora el principal motor del crecimiento de México”, agregaron los expertos del también segundo mayor proveedor de ETFs en el mundo.
Este comportamiento ha llevado a muchos a replantearse no solo los tiempos de la potencial recesión, sino sus características.
Los expertos de Grupo Financiero Banorte consideran que de materializarse una recesión en Estados Unidos, ésta podría ser moderada y de corta duración, factores que sin duda serían buenas noticias para México.
“El desempeño de la economía mexicana será altamente dependiente de cómo transitará Estados Unidos la posible recesión, pero con algunos factores positivos provenientes del nearshoring”, escribieron analistas liderados por Alejandro Padilla, director general adjunto de análisis económico y financiero de Banorte, en un reporte.
En suma, Padilla prevé que el ciclo de alza de tasas en México podría concluir en con una tasa terminal de 11%, nivel que podría mantenerse hasta el tercer trimestre del año y bajar a 10% antes de lo previsto para sobrellevar las agitaciones provocadas por las condiciones económicas más restrictivas.
Lo anterior hizo que Padilla y su equipo elevaran sus pronóstico de crecimiento del producto interno de México de 1% a 1.5% para este año. Dicho pronóstico lo comparten con los expertos de Vangurad, pero podría ser revisado al alza con una expansión de 2% si Estados Unidos evita caer por completo en una recesión.
De momento Bank of America ya “pateó” su pronóstico para que se materialice la tan esperada recesión después del primer trimestre, aunque no son tan optimistas como otros sobre el desempeño del país.
Carlos Capistrán, economista de BofA para Canadá y México, elevó su pronóstico de crecimiento para México en 2023, de una tasa negativa de 0.5% a una positiva de 0.3%. No obstante, recortó más de la mitad su estimación para el siguiente año, de 1.5 a 0.6%. Así mismo espera cuatro trimestres de crecimiento negativo en 2023.
"Por el lado económico, es probable que los principales canales de transmisión de la desaceleración de Estados Unidos hacia México sean las remesas y el comercio", escribió Capistrán en su reporte. "Conforme el mercado laboral en Estados Unidos se desacelere, es probable que las remesas también lo hagan [. . .] Con respecto al comercio, los ciclos de manufactura están altamente correlacionados y las importaciones mexicanas de bienes intermedios ya están disminuyendo, lo que pronto afectará las exportaciones".