Los días de tranquilidad de la gente del pueblo de Gómez Farías, en la sierra de Chihuahua, fueron interrumpidos por los enfrentamientos entre grupos delictivos lo que provoca el terror entre los habitantes

; los ataques a viviendas y negocios son parte de la demostración de una lucha de poder por demostrar armamento de los integrantes de los cárteles.


Queman vehículos, queman casas, escucha uno gritos de las personas que tratan de ponerse a salvo y a ellos no les importa que sean jóvenes, viejos, niños, adultos, si son personas de bien, a ellos no les importa, a ellos lo único que quieren es satisfacer no sé que clase de instintos, serán instintos animales porque no se detienen ante nada”, comentan habitantes de Gómez Farías.

El día ocho de noviembre el doctor Blas Juan Godínez fue privado de su libertad en medio de una balacera que inició a la media noche y terminó pasadas las cinco de la mañana.

El médico y dueño de un restaurante fue sacado de su domicilio con lujo de violencia; su esposa imploraba que no se lo llevaran, pero el grupo criminal integrado por más de 30 hombres armados abrió fuego contra el negocio y varios vehículos, antes de alejarse del lugar junto con el galeno.


Mi padre era el encargado de alimentar a los elementos destacamentados aquí en Gómez Farías, de la Comisión Estatal de Seguridad, en su negocio. El otro móvil que yo creo que pudiera ser, es la situación del servicio médico, ya que ellos entraron por aquí por mi consultorio, el cual está debidamente identificado y por eso se lo llevaron; te lo comento, a mí y a algunos compañeros del hospital integral de Gómez Farías, nos ha tocado atender a varios heridos, a veces en el hospital o a vences fuera; a mí me han llevado, he estado fuera un par de horas fuera de mi centro de trabajo, del hospital, atendiendo heridos y me regresan con bien; no incomunicado, ni de una manera violenta, pero si a la fuerza tienes que ir atender a estos grupos del crimen organizado¨, relató el doctor Juan Godínez Ortega, hijo del médico “levantado”.

La acción en contra del galeno detonó reacciones en los médicos de las zonas rurales de Chihuahua, así como de los pasantes de medicina que prestan sus servicios; huyeron del lugar y exigen seguridad para ejercer su profesión, además del rescate del doctor Godínez.


Todos los médicos de aquí de Gómez Farías, del hospital estamos unidos en una protesta de no abrir el hospital hasta que se garanticen condiciones de seguridad; las condiciones de seguridad ya teníamos en el hospital una patrulla, el día de la balacera, desafortunadamente esa patrulla salió de ahí del hospital, no salvaguardó la vida de los trabajadores de ahí”, agregó.

En el lugar, la presencia policiaca es solo eso, una presencia sin efecto, los agentes son rebasados en número y armamento frente a los convoys de hombres fuertemente armados que se pasean en este lugar de la sierra, sin que nadie se atreva siquiera a voltear a verlos, menos a hacerles frente.


Sí es muy doloroso y se siente uno muy impotente de no poder hacer nada porque desgraciadamente esos grupos que se han presentado aquí, en nuestra comunidad, que antes era de lo más tranquilo, de lo más bonito, superan en número, en armamento y en adiestramiento a la policía”, explicó.

En el mes de octubre el doctor Blas Juan Godínez se reunió con el fiscal de Chihuahua, acordaron que se brindaría seguridad en el poblado y en especial a los médicos; no pasaron 15 días cuando el galeno se convirtió en víctima de la delincuencia.


Acuden hasta aquí, de aquí es de donde se lo llevan, aquí es el dormitorio de mi padre, mi padre se encontraba dormido, se sienta en la cama, prende su lámpara y le preguntan: ¿Tu eres el doctor Blas Juan, tú eres el doctor Blas Juan? En cinco ocasiones, él les comenta que sí, lo paran y se lo llevan”, narró el hijo de la víctima.

Hasta el momento no se sabe si el médico fue obligado a ir con ellos para atender delincuentes heridos o para ser privado de su vida.

FUENTE MSN Y EXCELSIOR