A pesar de los constantes anuncios del reforzamiento de la seguridad, ayer se registró una nueva jornada violenta que dejó un saldo de 23 homicidios dolosos en ocho municipios de esta entidad, donde el Ejército dirige la estrategia contra el crimen.

Entre las víctimas se encuentran tres mujeres, una de ellas embrazada, así como un médico traumatólogo que laboraba en el hospital del IMSS del puerto de Acapulco, y cinco hombres calcinados al interior de un vehículo en Chilapa.

De acuerdo a los reportes oficiales, los crímenes se registraron en Acapulco; Chilapa; Iguala; Zihuatanejo; Coyuca de Benítez; Cuajinicuilapa; Tlapa y Atlixtac donde paradójicamente el gobierno estatal y federal ha desplegado policías y soldados para tratar de revertir los efectos de la violencia, inseguridad e impunidad.

En contraste con el drama vive la sociedad, el gobernador Héctor Astudillo Flores se ha limitado a señalar que la entidad es un lugar seguro porque los muertos y desaparecidos no son turistas ni personas famosas, además de afirmar que la brutal ola de violencia no afecta la afluencia de visitantes en las zonas turísticas.


La jornada violenta de este domingo 12 se suma a la estela de delitos que son cometidos impunemente en la entidad.

Los reportes oficiales indican que en distintos hechos registrados en Chilapa, fueron asesinadas 10 personas, entre ellas dos mujeres -una estaba embarazada-, y cinco hombres que fueron encontrados calcinados al interior de un taxi que dejaron en las inmediaciones del arco principal del poblado donde se encuentra un retén del Ejército.

En el municipio costero de Coyuca de Benítez, fue encontrado ejecutado y con huellas de tortura el cuerpo de un médico traumatólogo que laboraba en el hospital del IMSS de Acapulco, quien había sido privado de su libertad tres días antes.

En la parte serrana del mismo municipio, se reportó el crimen de dos hombres en el poblado de Tepetixtla.

En el puerto de Acapulco, fueron asesinados tres hombres en distintas colonias, a dos de ellos prácticamente los acribillaron al interior de su domicilio donde irrumpieron grupos armados.

En la región de la Montaña, fue reportado un joven ejecutado con un tiro en la cabeza en la cabecera de Tlapa y en la comunidad de Tlatlauquitepec, municipio de Atlixtac, se reportó el hallazgo de otro hombre asesinado a machetazos.

En la región de Costa Chica, fueron exhumados de una fosa clandestina los cuerpos de dos jóvenes, entre ellos una mujer, en el municipio de Cuajinicuilapa.

En la ciudad de Iguala, se reportó el hallazgo de dos hombres acribillados en plena zona urbana de esta ciudad controlada por la delincuencia.

En tanto que en el balneario de Zihuatanejo, otro joven fue ejecutado en las inmediaciones del centro de este destino turístico, en la región de Costa Grande.

Hasta el momento, el gobierno de Astudillo ha hecho mutis ante esta ola de violencia registrada en la entidad, donde las autoridades se alistan para celebrar la temporada turística de semana santa, así como la Convención Nacional bancaria y el Tianguis Turístico Internacional en el puerto de Acapulco.

Fuente: proceso.com.mx