Según las predicciones, la temporada de gripe de este año será potencialmente mala, y los médicos aconsejan a las personas, sobre todo a las que tienen diabetes, que se vacunen.

Muchos diabéticos no se vacunan contra la gripe estacional cada año, según la Asociación Americana de Educadores de la Diabetes (American Association of Diabetes Educators, AADE). Algunas personas con la enfermedad del azúcar en la sangre no se dan cuenta de que están en riesgo de complicaciones relacionadas con la gripe. Otras tienen un temor mal fundamentado de que la inyección provocará una reacción adversa, explicó el grupo.

Pero los diabéticos son más propensos a desarrollar problemas graves de salud asociados con la gripe si contraen el virus, advirtió la AADE. El grupo dijo que la vacuna contra la gripe es una forma segura y efectiva de prevenir o reducir la gravedad de dichas complicaciones.

"Reducir los riesgos es una de las siete conductas clave de autocuidado de la AADE para gestionar la diabetes, y ponerse la vacuna contra la gripe cada otoño es una forma excelente de reducir el riesgo de enfermar", aseguró en un comunicado de prensa de la AADE Evan Sisson, un educador de la diabetes certificado. "Su disponibilidad está generalizada, solo tarda unos minutos y puede hacer una diferencia real en la salud".

Una buena higiene de las manos es otra forma importante de permanecer sano y, con algo de suerte, evitar la gripe, anotaron los expertos en la diabetes.

Hay varias formas en que una vacuna contra la gripe estacional puede ser beneficiosa para los diabéticos, según la AADE. Entre éstas se encuentran:

Una mejor gestión de la enfermedad. La gripe y otras infecciones pueden aumentar los niveles de azúcar en la sangre y perturbar un plan de dieta saludable. Evitar la gripe también puede ayudar a las personas con diabetes a mantenerse al día y gestionar la afección.

Prevención de las complicaciones. Las personas con diabetes son más propensas a ser hospitalizadas por complicaciones relacionadas con la gripe, como la neumonía. También son más propensas a morir de gripe.

Una mejora para el sistema inmunitario. A medida que la gente envejece, su sistema inmunitario se debilita. La gripe puede suponer un esfuerzo para el sistema inmunitario, lo que aumenta el riesgo de complicaciones graves e incluso la muerte. Una vacuna contra la gripe puede ayudar a los sistemas inmunitarios debilitados a evitar la gripe. Las personas de a partir de 65 años de edad deben hablar con el médico para ver si la vacuna de dosis alta es adecuada para ellas.

La AADE también añadió que las personas que enferman de gripe deben acudir al médico de inmediato y hablar sobre la posibilidad de tomar antivirales, que pueden acelerar la recuperación.

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