La reina Isabel II tuvo cáncer en los huesos, revela libro de Boris Johnson

En su libro de memorias “Unleashed”, el ex primer ministro británico, Boris Johnson, revela que la reina Isabel II tuvo un tipo de cáncer en los huesos.

Los médicos de la reina Isabel II “estaban preocupados de que en cualquier momento pudiera entrar en un declive brusco”, escribe el ex primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, quien en su libro de memorias, Unleashed, revela que la monarca fallecida el 8 de septiembre de 2022 tenía un tipo de cáncer en los huesos.



En sus páginas, el político describe el mal estado físico que presentaba la reina en la última reunión oficial que sostuvieron y que, visto a la distancia, eran un signo inequívoco de que Isabel vivía sus últimos días.


El cáncer de huesos que tuvo la reina Isabel II atacó a la monarca en sus últimos años de vida, según da a conocer Boris Johnson en sus memorias, que serán publicadas el próximo 10 de octubre en Reino Unido y en las que el político de 60 años revive el último encuentro que tuvo con la mamá del rey Carlos III, en su residencia de Balmoral, en Escocia, dos días antes de su muerte.

El mal estado físico de la reina Isabel II en su última reunión con Boris Johnson
Durante la última reunión que Boris Johnson, tuvo en su calidad de primer ministro con la reina Isabel II, en septiembre de 2022 en el castillo de Balmoral, el secretario particular de la monarca le hizo una advertencia –antes de que entrara al salón donde se llevó a cabo la audiencia–, que la reina se había “desmejorado bastante durante el verano”, según se lee en el adelanto del libro Unleashed, donde el político conservador plasma sus memorias.



Aquel día, fue la última reunión oficial que tuvo Johnson con Isabel II, ya que el entonces primer ministro fue sucedido en el cargo por Liz Truss, quien tuvo una permanencia breve en el mismo y dejó su lugar en octubre del 2022, para la llegada de Rishi Sunak.

Boris Johnson recuerda cómo fue su última reunión con la reina Isabel II
En el extracto de su libro de memorias, titulado Unleashed, Boris Johnson deja ver la gran admiración y respeto que sentía por la reina Isabel II, de quien destacó que, incluso en su última reunión oficial y que ocurrió dos días antes de la muerte de la monarca, ella se encontraba lúcida y de buen humor, en contraste con el evidente deterioro físico que presentaba y del que le advirtió Sir Edward Young, secretario particular de la soberana.

Sobre aquel día, escribe Johnson en el texto, “pude ver de inmediato lo que Edward quería decir”, al sentarse frente a Isabel II y notar los estragos que su estado de salud habían causado en el cuerpo de la reina, quien tenía 96 años de edad.

“Parecía pálida y más encorvada, y tenía moretones oscuros en las manos y las muñecas, probablemente de sueros o inyecciones", se lee. Sin embargo, agrega, que la mente de Isabel estaba “completamente intacta a pesar de su enfermedad” y que sonrió en distintas ocasiones durante su conversación.



Boris Johnson calificó como “más que un privilegio” las audiencias semanales que tuvo con la reina durante sus años como primer ministro.

“Fue un bálsamo, una forma de psicoterapia gratuita. Era como estar en la escuela y que una abuela muy querida te llevara a tomar el té”, asegura el político, quien en dichas reuniones habló con la monarca sobre temas esenciales para la sociedad británica, como el Brexit (y seguramente el Megxit, también), la pandemia de Covid-19 y la invasión rusa de Ucrania.