La inversión extranjera directa en México desaceleró en el primer trimestre del año, ante un avance aún incipiente del proceso de relocalización de empresas hacia el país, también conocido como nearshoring.

En los tres meses hasta marzo, la economía mexicana captó 20 mil 313 millones de dólares por concepto de IED, de acuerdo con cifras de la balanza de pagos reveladas por Banco de México.

Con esto, las inversiones registraron un descenso de 13.6% frente a los 23 mil 499 millones de dólares que llegaron al país durante el primer trimestre de 2023. El monto fue el más bajo para un periodo similar en los últimos tres años, aunque también el mejor de los últimos cuatro trimestres.

Las cifras del banco central contrastan con las que compartió previamente la Secretaría de Economía, pues si bien el monto reportado fue prácticamente idéntico, la dependencia federal dijo que representaba un alza de 9% año a año y el monto más elevado para un primer trimestre en la historia.

Banco de México detalló que durante el periodo Iberdrola España realizó la venta de 13 plantas eléctricas en el país a la empresa Mexico Infrastructure Partners, por un monto aproximado de seis mil 200 millones de dólares, la cual todavía no está reportada en el Registro Nacional de Inversiones Extranjeras.

“Al considerar dicha estimación de la transacción, la inversión directa habría exhibido un endeudamiento neto de 12 mil 955 millones de dólares, en lugar del reportado de 19 mil 155 millones”, dijo Banco de México, en un comunicado. “Así, la cuenta financiera habría presentado un endeudamiento neto de 14 mil 156 millones de dólares, en lugar del de 20 mil 356 millones, y el renglón de errores y omisiones habría resultado en un flujo negativo de mil 562 millones de dólares”.

De los recursos que llegaron al país durante el periodo, 599 millones de dólares fueron etiquetados como nuevas inversiones, 19 mil 615 millones como reinversiones y 99 millones como operaciones de cuentas entre compañías.

Esta situación también refleja un avance lento del nearshoring, pues la mayor parte de los recursos proviene de empresas que ya tienen operaciones en territorio nacional, mientras que los anuncios de nuevas compañías interesadas en trasladarse al país están tardando en materializarse.

Entre enero de 2023 y marzo de este año, hubo más de 360 anuncios de inversión en el país por 137 mil 800 millones de dólares, de acuerdo con la consultora Kearney. Esa cantidad eventualmente podría trasladarse al apartado de inversiones nuevas, una vez que los anuncios se concreten.

No obstante, algunos consideran que el nearshoring impactó los flujos de inversión extranjera incluso desde 2023, cuando alcanzó su registro más alto hasta ahora, sin contar los años en que hubo movimientos atípicos por fusiones o reestructuras de empresas.

“El impacto del nearshoring comienza a visualizarse en nuestra economía a través de la IED, que en 2023 tuvo un acumulado de 36 mil 58 millones de dólares”, dijo Luis Foncerrada, asesor económico de American Chamber of Commerce México, en conferencia.

Los datos parecen no respaldar esta visión, pues del total de IED que llegó al país el año pasado, únicamente 13.3% fue catalogado como inversión nueva, además de que el monto invertido fue el más bajo desde 2012.

Foncerrada agregó que el nearshoring plantea una oportunidad sin precedentes para la economía mexicana y se complementa con las empresas que ya están instaladas en el territorio, especialmente de Estados Unidos, quienes tienen un alto interés en mantener aquí sus cadenas productivas.
* César Pérez contribuyó a la elaboración de esta historia.