La toma de casetas de peaje se ha convertido en un negocio redondo. Casi todos los días, con cualquier pretexto, alguna caseta de la red carretera nacional es tomada por diferentes grupos de personas que exigen un pago a los automovilistas para dejarlos continuar su camino.

Manifestantes colocaron un plantón en la caseta de cobro de la Autopista México-Cuernavaca; 20 personas, 10 en cada sentido, tomaron el control y cobro del peaje, la cuota era de 50 pesos por auto.
En esta garita cada vez es más constante ver a grupos de manifestantes pidiendo "cooperaciones voluntarias". En tan sólo cuatro minutos pasaron 80 vehículos, haga cuentas, representan alrededor de 4 mil pesos en horas de poca afluencia.
Una mujer que proviene de Tepatepec, Hidalgo, localidad a 200 kilómetros de distancia de la caseta de cobro, asegura que “el gobierno no nos quiere apoyar y el dinero es para restaurar nuestra escuelita”.

Otro manifestante, asegura que vienen de una escuela pero al interrogarlo sobre el nombre de la escuela, simplemente no lo supo.

Vigilantes de la caseta comentaron que llegan a ser más de tres, hasta cuatro, los grupos de manifestantes que llegan al día para tomar la vía de acceso a la autopista, incluso pelean entre ellos para decidir quiénes van a “cobrar”.
UNOTV