LLAMA IMSS A MUJERES EMBARAZADAS A DISMINUIR FACTORES DE RIESGO PARA EVITAR CARDIOPATIAS CONGENITAS
Por Redacciòn, 15/02/2019 08:04
• En México cada año, hasta 8 de cada mil bebés nacen con alguna cardiopatía congénita. Esta enfermedad pasa desapercibida, ya que no existen síntomas durante el embarazo.
En el marco del Día Internacional de las Cardiopatías Congénitas que se celebra este 14 de febrero el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) informa en México cada año, hasta 8 de cada mil bebés nacen con alguna cardiopatía congénita, por lo que llama a las mujeres embarazadas a llevar un adecuado control prenatal y no automedicarse durante el embarazo para reducir los riesgos de que el feto tenga malformaciones del corazón.
Una cardiopatía congénita es una malformación del corazón o de los grandes vasos sanguíneos que se presenta en el feto antes del nacimiento.
Existen factores de riesgo como enfermedades virales como la rubeola o ingesta de drogas durante el embarazo, antecedentes familiares, alteraciones cromosomáticas, edad de los progenitores o mal control prenatal, expresó el doctor Regino Díaz Bustos, neonatólogo del Hospital Regional de Zona No. 66.
Además señaló que esta enfermedad, pasa desapercibida, ya que no existen síntomas durante el embarazo y puede ocurrir en población sin factores de riesgo, lo cual dificulta su detección.
Entre las evidencias que pueden mostrar que un niño ha nacido con una cardiopatía son el cansancio al lactar, la lactancia entrecortada, la sudoración excesiva y las palpitaciones.
“Eso genera una insuficiencia cardiaca congestiva que no es buena para el niño porque impide que se alimente bien y, por lo tanto, no se desarrolla adecuadamente”, indicó.
Debido a su escasa alimentación, estos pacientes pueden tener anemia o desnutrición.
Agregó que también pueden desarrollar una hipertensión pulmonar que llevará al niño, a mediano plazo, a necesitar un trasplante de pulmón. Por eso es muy importante detectar a tiempo este tipo de cardiopatías.
Existen más de 50 malformaciones, la mayoría son leves y solo requieren revisiones, pero otras necesitan cirugías o cateterismos repetidos.
La prevalencia de estos padecimientos se incrementa cuando uno de los padres padece un defecto cardiaco como: estenosis aortica, canal AV completo, coartación de Ao, estenosis pulmonar o tetralogía de Fallot.
Así como tener antecedentes familiares como cardiopatías congénitas, cardiomiopatías, síndromes y muerte súbita en menores de 25 años.
Además antecedentes ginecoobstétricos como patologías maternas (diabetes, lupus, infecciones toxicomanías e ingesta de agentes teratógenos.
Por lo anterior el especialista puntualizó que es importante llevar un adecuado control prenatal y no automedicarse durante el embarazo, ingerir ácido fólico y yodo en alimentos o el suministro de complementos.