Hace 309 años, un 12 de octubre de 1709, el entonces gobernador Don Antonio Deza y Ulloa, pactó el acta de fundación de la ciudad de Chihuahua, por ello congregados en la Plaza de Armas funcionarios municipales, estatales, estudiantes y ciudadanos en general celebraron un aniversario más de la fundación de Chihuahua.

Este acto conmemorativo dio inicio con los honores a la Bandera en la Plaza de Armas, a un costado del monumento a Deza y Ulloa, para luego tener la intervención del historiador de la ciudad, Rubén Beltrán Acosta, quien destacó que los chihuahuenses y sus autoridades, conmemoran con esperanza y alegría esta fiesta de aniversario, sabiendo que las sociedades que transitan con altivez por el camino de su historia son las que han sabido construir su presente y enfrentan los retos del futuro orgullosas de sus raíces y con un verdadero sentido de identidad y pertenencia.


Al hacer uso de la palabra la alcaldesa, Maru Campos Galván, recordó una cita del escritor chihuahuense José Fuentes Mares, quien señala en su libro “Y México se refugió en el desierto” que “un 12 de octubre en la confluencia de dos ríos alguien dio el grito de agua y se fundó Chihuahua”.


La alcaldesa mencionó que este 309 aniversario de la fundación de Chihuahua invita a celebrar, recordar y sobre todo mirar hacia el futuro. Expresó que; “desde el corazón de la capital, desde esta Plaza de Armas, nos reunimos para dar gracias porque gran parte de lo que somos y tenemos es fruto de lo que nuestros antecesores hicieron. Somos testigos de una riqueza que va desde la gastronomía, edificios, tradiciones y grandes valores que siempre nos han caracterizado a los chihuahuenses, gente trabajadora, aguerrida, noble, leal y hospitalaria”.


Por lo anterior Maru Campos señaló que la conmemoración de esta fecha es una oportunidad para renovar propósitos y construir una herencia para las generaciones futuras de vida próspera y humana.


Los asistentes a este evento conmemorativo pudieron ser partícipes de una breve representación de la fundación de la ciudad, además de deleitarse con “El Corrido de Chihuahua” y guardar un minuto de silencio en el monumento a Deza y Ulloa, donde se montó una guardia de honor por parte de la Alcaldesa y demás autoridades presentes.


En el presídium acompañaron a la Presidenta Municipal el secretario general de Gobierno, César Jáuregui Robles; el diputado, Fernando Álvarez Monje; el síndico, Amín Anchondo; la regidora, Mónica Borruel; de la V Zona Militar, el capitán José Alfredo Jiménez; el director de Desarrollo Humano, Marco Antonio Bonilla; de la Secretaría de Educación, Miguel Ángel Valdéz; el presidente del Supremo Tribunal de Justicia, Pablo Héctor González; así como el historiador, Rubén Beltrán.