La niña envuelta en lágrimas es el rostro que se está volviendo símbolo de la nueva política de inmigración de "tolerancia cero" del presidente Donald Trump, que ha llevado a la separación de miles de padres e hijos indocumentados.

El inquilino de la Casa Blanca reafirmó ayer lunes sus discutidas medidas contra las familias de inmigrantes en la frontera sur de su país, a pesar del escándalo por los miles de casos de separación familiar y dijo:

"Estados Unidos no será un campo de inmigrantes, y no será un complejo para mantener refugiados. No lo será". Donald Trump


Solo tiene dos años
La pequeña de 2 años observa a los adultos a su alrededor con lágrimas en sus aterrados ojos, su cabello a un lado de su rostro y su boca abierta en un grito aterrorizado.


La niña, que estaba con su madre y otros inmigrantes, había atravesado el Río Bravo y los oficiales de la Patrulla Fronteriza los detuvieron en Texas la semana pasada.


EU no será un campo de inmigrantes, y no será un complejo para mantener refugiados, dijo Trump.


La imagen del fotógrafo John Moore, muestra a una niña de dos años que llora desesperadamente mientras mira a su madre. La cara de la mujer no se ve en la imagen, pero, de acuerdo con Moore, un agente de control de fronteras la estaba registrando en ese mismo instante.


"Le dijeron [a la madre] que bajara a su hija mientras la registraban. La niña se puso inmediatamente a llorar", contó el fotógrafo sobre el conmovedor momento.


"Sólo hice un par de fotografías y me sentí prácticamente sobrepasado por las emociones". John Moore


LA madre y su pequeña llegaron desde Honduras y llevaban viajando un mes. Venían de Reinosa, Tamaulipas y "cuando se bajaron de las balsas buscaron un camino en tierra con el que proseguir su aventura".


Se agruparon al caer la noche en un lugar cercano a McAllen, Texas conocido como El Rincón, un lugar al que acuden frecuentemente las familias que piensan pedir asilo en Estados Unidos. Fue ahí donde fueron interceptadas por la Patrulla Fronteriza.

Fuente: unotv.com