Muy buenas noches a todas y a todos, distinguidas y distinguidos jóvenes atletas de todo el país.

Quiero empezar por darles las gracias a todas las autoridades que están aquí presentes, acompañándonos en el inicio de este evento tan esperado y tan empeñado por todos nosotros.

Quiero agradecer la presencia de los representantes de los poderes de nuestro estado, particularmente quiero darle la bienvenida a Alfredo Castillo, director general de la Conade, eres muy bienvenido a Chihuahua y quiero agradecer a la Comisión que cuando se ofertó la sede nacional de la Olimpiada 2018 y que Chihuahua levantó la mano, la Conade decidió ir conjuntamente con nosotros para resarcir a los chihuahuenses, como bien lo dijo Alfredo Castillo, de esta importante sede que hace dos años estuvo anunciada, pero que no se pudo concretar.

Ahora lo podemos hacer y los podemos recibir a todas y a todos ustedes con los brazos abiertos, con enorme cariño, con enorme admiración.

Les doy la bienvenida a Chihuahua y es para mí un verdadero privilegio recibir a tantas y tantos atletas llenos de talento y vitalidad, que son muestra de la gran reserva que tiene nuestro país en su juventud.

Hoy han llegado hasta aquí gracias a su enorme esfuerzo, a su disciplina y perseverancia. De entrada quiero felicitarlos por eso, porque llegan a esta Olimpiada las y los mejores deportistas de México entero.

La Olimpiada Nacional es, desde 1996, -año en el que se creó-, el máximo evento deportivo a nivel nacional, pero además es un extraordinario semillero de talento deportivo, pues gracias a ésta se han podido visibilizar deportistas excepcionales que, con ahínco y tesón, han ido a conquistar en nombre de nuestro país medallas en justas internacionales.

Es por ello que hoy nos sentimos muy contentos de recibirles, así como de ser la sede principal de esta Olimpiada que nos permitirá ser anfitriones de 12 mil deportistas incluidos por supuesto los instructores, atletas de todas las entidades del país. Este evento cobra además especial significado, ya que este año conmemoramos 50 años de las Olimpiadas de México 68.

Por eso, el gobierno de Chihuahua ha hecho un gran esfuerzo, en términos de sus finanzas estatales, para poder ser la sede nacional de este evento y por ese empeño y por esa apuesta, por supuesto que es el momento propicio para felicitar a nuestro director del Instituto Chihuahuense del Deporte, Juan Pedro Santa Rosa, felicidades Juan Pedro, por tu empeño y porque lo hemos logrado y porque sabemos que Chihuahua va a trascender con su sede y con su anfitrionía.

Porque entusiasma a nuestra sociedad en conjunto observar gestas como ésta, a jóvenes esforzados, dedicados y realmente comprometidos con sus respectivas disciplinas. Jóvenes que son orgullo de sus familias, de sus comunidades y de sus estados y ello realmente resulta esperanzador.

Porque aquí han llegado por el esfuerzo de sus padres también, por el esfuerzo de sus entrenadores, por el esfuerzo de las autoridades que los impulsan.

Y es que, para nadie es una novedad que el deporte es un instrumento de cambio y para el cambio. De entrada, favorece el buen estado físico y mental. Está escrito desde hace muchos años, el apotegma latino “mente sana en cuerpo sano”.

La Organización de las Naciones Unidas ha dicho que el deporte es un facilitador importante del desarrollo sostenible pues contribuye cada vez más, a hacer realidad el desarrollo y la paz promoviendo la tolerancia y el respeto, y que respalda también el empoderamiento de las mujeres y los jóvenes, las personas y las comunidades, así como los objetivos en materia de salud, educación e inclusión social.

Quién mejor que ustedes para confirmarnos que el deporte promueve y fomenta valores como el respeto, la cooperación, la tolerancia, la solidaridad, la inclusión, la honestidad y la empatía, pero no se queda ahí, porque también forma líderes y coadyuva a la consolidación de equipos.

El deporte es la gran doctrina universal que une a la humanidad, todas y todos los atletas aquí presentes darán muestra de ello en estos días de competencia y no me queda duda de que con orgullo y dignidad sabrán representar a sus respectivos estados, a sus comunidades, pero al final tengan en cuenta que es muy probable que su esfuerzo los lleve a representar a nuestro país.

Y es por ello que hoy los invito a que den todo su esfuerzo, que salgan con la convicción de obtener su mejor marca y sobre todo que disfruten este tiempo de competencia que les toca vivir porque son ustedes ya un ejemplo de perseverancia y disciplina. No les deseo suerte porque esa no la necesitan, mucho menos ustedes que están forjados y forjadas en la cultura del esfuerzo, lo que les deseo es el éxito, que es lo que sigue a la preparación, a la lealtad al sacrificio personal, no solo en el deporte, sino en la vida.

Deseo que su arrojo, dedicación y sacrificio, se vean coronados y que esta Olimpiada sea detonador para que sigan esforzándose y aprovechando el privilegio que tienen de estar aquí, de competir profesionalmente, para que se conviertan también en agentes de cambio, para que desde su trinchera se conviertan en portavoces de la paz y en motivadores de nuestras niñas, de nuestros niños, de nuestros jóvenes… y de la sociedad en general.

Bienvenidas y bienvenidos al estado más grande de México, no solo por su territorio, sino por su gente, bienvenidos a Chihuahua.

Y si gustan ponerse de pie para hacer la declaratoria inaugural:

Siendo las 19:00 horas con 23 minutos de este miércoles 16 de mayo del 2018, declaro formalmente inaugurada la Olimpiada Nacional y el Nacional Juvenil Chihuahua 2018, deseándoles éxito a cada uno de los participantes, enhorabuena.