El mandatario venezolano consideró "ilegal" el cierre de operaciones de la empresa estadounidense y señaló que pedirá código rojo a la Interpol para sus dueños y accionistas por marcharse de esa forma.

La empresa estadounidense de alimentos Kellogg’s se sumó a la lista de las multinacionales que han cesado sus operaciones en Venezuela, “debido al deterioro económico del país”, por lo que el presidente Nicolás Maduro ordenó tomar la planta durante un mitin el pasado martes.

De acuerdo con Efecto Cocuyo, la mañana del 15 de mayo los trabajadores se encontraron con la sorpresa de que la fábrica con más de 100 años de presencia en Venezuela, había anunciado el cese de sus operaciones sin dar a conocer las causas. Esto derivó en protestas en la sede de Maracay.


“En cumplimiento de las regulaciones laborales correspondientes, el pago completo de los salarios, beneficios y prestaciones sociales por virtud de la terminación laboral ha sido debidamente depositado en las cuentas de nómina y fideicomiso de cada uno de los trabajadores”, señaló la empresa a través de un comunicado a sus trabajadores luego de haber depositado las liquidaciones en sus cuentas bancarias.


Al respecto, el presidente venezolano Nicolás Maduro señaló que entregó el control de la fábrica -“en manos de unos inversionistas mexicanos”-, a los más de 400 trabajadores y especificó que su gobierno ha “iniciado un proceso judicial contra los líderes empresariales de Kellogg’s porque su salida es inconstitucional”.


Según el presidente y candidato presidencial la empresa trasnacional cerró sus puertas porque faltan cuatro días para las elecciones del próximo 20 de mayo y “creen que el pueblo se va a asustar”.

Fuente: aristeguinoticias.com