LA GRAN “MENTIRA CHIHUAHUENSE”
Por Redacciòn, 15/03/2017 08:30
Una de las críticas más comunes entre los ciudadanos chihuahuense a nuestros paisanos que viven en Estados Unidos es la burla que hacemos del cambio de actitud y vida que estos experimentan; la más común es cuando les sacamos la garra por su nueva manera de hablar.
Cuenta mi mujer, que Elsa, una vecina, se fue un día con la intención de ir a vivir en Estados Unidos porque tenía al esposo trabajando en Kansas. Ella, con su pequeño hijo, se fueron por El Paso con el pasaporte local y al llegar a la primera revisión la devolvieron por que no lleva permiso. Total que nomás duró el tiempo que lleva ir y venir al paso (un día), pero ese día bastó para que comenzara a tener problemas con su dicción, se le empezó a olvidar el español, inmediatamente cuando la retacharon llegó con las vecinas a platicarles, el niño venía muy cansado y con hambre, Elsa entrada en la plática no le hacía caso hasta que el niño comenzó a jalonearle el brazo pidiendo comida, ella muy apurada y en un español entrecortado le preguntó al niño, ¿Tony, quieres un Cookie?. Criticamos despiadamente a nuestros paisanos que por necesidad se fueron a otras tierras, pero no somos capaces siquiera de aceptar que hemos plagiado la música de Nuevo León, La Norteña de Acordeón y Bajo sexto y ahora hasta tenemos el descaro de presentarla ante México y el mundo como propia.
De estas anécdotas verdaderas como la de Elsa, nuestro país y Chihuahua estamos plagados. Somos muy buenos para ver la astilla en el ojo ajeno, pero como dice el dicho, la zorra nunca se ve la cola, es el caso de nosotros los chihuahuenses, nobles, valientes y leales. La verdad en cuanto a valentía no tengo duda, a veces pecamos de esa cualidad o defecto, nos matamos por todo y por nada, pero en cuanto a Nobleza y Lealtad, yo pondría en duda la cabalidad de esas virtudes en la personalidad de nosotros los chihuahuenses, al menos en los últimos tiempos.
La gran mentira Chihuahuense que para la mayoría de nosotros no tiene la menor importancia, “La música tradicional de aquí es la “Norteña”, pero como me dijo recientemente un alto funcionario federal del cual no voy a decir el nombre, “Ahorita la gente se preocupa por cosas más importantes como juntar para la comida, que se van a andar ocupando de que la música norteña no es de Chihuahua”.
No voy a explicar detalles de lo que no es, se lo dejo de tarea, de lo que voy hablar es de lo que si somos, nos hemos convertido en adoradores de la mentira, vivimos en la nueva era de la mentira, la disfrutamos y la hacemos nuestro diario vivir. Un ejemplo muy claro y que no queremos ver por muchas razones válidas todas para el que las quiere adoptar, es el cumulo de mentiras que pregonó nuestro nuevo gobernador en campaña.
Dice Eber Patiño Ruiz “Ahora, que desaparezca la mentira de la política, de la diplomacia, del periodismo, del mundo, es un hecho imposible, no hay vuelta atrás, es una utopía pensarlo y menos hacerlo. Si todos dijéramos la verdad de lo que pensamos, el mundo se convertiría en un verdadero caos, porque vivimos en un mundo de mentiras que es mejor seguir aceptando lo que damos por verdad, que aceptar de plano la realidad de las cosas.”
En búsqueda de la verdad presentaremos este Jueves 16 Marzo en el auditorio de la Facultad de Filosofía y Letras de la UACH la ponencia y el libro Los Norteños no son de Chihuahua en punto de la 4:00 de la tarde entrada libre para todo público.
Urbano N. Fuentes Lozano “Claro Franco”